Bajo el lema “Shekinah”, el Movimiento Misionero Mundial de España celebró el 25 y 26 de enero pasado el 15° aniversario del templo de la ciudad de Burgos, capital de la comunidad autónoma de Castilla y León, con la presencia de fieles de las ciudades de Zaragoza, Arnedo y Soria.
En el culto inaugural, el pastor Wilson Santillán, misionero peruano que difunde el Evangelio en Israel, fue el instrumento elegido para anunciar la Palabra. Fundamentado en Hageo 2:1-9, expuso el tema “La gloria postrera será mayor que la primera”.
En su prédica, el pastor Santillán afirmó que los cristianos deben estar seguros de que el Señor siempre está presente para ayudar a todo aquel que necesite su protección. Asimismo, acotó que se deben seguir los pasos de Jesús.
En el segundo servicio, el Evangelio del Todopoderoso estuvo a cargo del presbítero de la Zona 4 del MMM de España, reverendo Fisher Torrejón, quien expuso el tema “La presencia de Dios”. Respaldó su mensaje en Éxodo 33: 9-15.
Ayuno de primicias
De igual modo, del 3 al 5 de enero pasado, en el templo de la ciudad de Barcelona, el MMM de España efectuó un ayuno de primicias, bajo el lema “Honrando a Dios con lo primero”, que posibilitó que los hermanos de la capital de Cataluña dedicaran un espacio para estar más cerca del Altísimo.
En el primer servicio del evento, el reverendo Carlos Medina, Supervisor Nacional de la Obra establecida en suelo español, difundió el Evangelio mediante el tema “Tesoro celestial en vasos de barro”, basado en 2 Corintios 4:1-10.
En el segundo culto del ayuno de primicias, el hermano José Barrera fue el expositor de la Palabra. Fundamentado en Colosenses 2:9-15, el siervo pronunció la prédica “Un año feliz con Jesús”.
En el tercer servicio, el pastor Carlos Medina tuvo el privilegio de anunciar las buenas nuevas de Cristo. Respaldado en 1 Timoteo 6:12, emitió el mensaje “Armamento eficaz para pelear la buena batalla de la fe”.
En el cuarto culto, el hermano Renato Lizama se encargó de transmitir el mensaje del Creador. Apoyado en Juan 17:22-24, asumió la disertación “Shekinah, presencia divina continua”.
En el último servicio del ayuno, el reverendo Medina volvió a difundir la Palabra. En esta ocasión, basado en Éxodo 33:12-18 y 34:10, desarrolló la prédica “La gloria de Dios”.