Alrededor de 34 distritos de Lima fueron afectados por los huaicos e inundaciones, lo que ha ocasionado que decenas de personas queden atrapadas en los techos de sus casas, el segundo piso o simplemente a puertas cerradas cerca de dos días o más, sin comida, luz, ni agua.
Por ello, los fieles de diversos templos del M.M.M. desde las 4 de la mañana, se dirigieron a la cocina para preparar más de 2, 800 desayunos y almuerzos para los damnificados y el personal de apoyo, además instalaron carpas, y contaron con persomal médico que también los acompañó a las zonas más afectadas por el huaico.
Sin embargo, por el aumento del caudal del río tuvieron que tomar diversas precauciones para evitar el peligro, pero eso no impidió lograr su objetivo, “Llevar alimento a todos”.
Los vecinos que despertaron a las 3 de la madrugada para salvaguardar sus hogares y los trabajadores de la Municipalidad de San Juan de Lurigancho junto a la policía y fuerzas armadas, fueron llenos del amor de Dios a través de la acción de nuestros hermanos en Cristo.
Aún con inmensas ganas de ayudar, los hermanos decidieron tomar una pala y empezar a recolectar arena en costales para hacer una muralla y evitar el impacto de un huaico adicional a las 10 de la mañana en Huachipa. Niños y adultos cooperaron unidos en el amor del Señor.