El 31 de octubre de 1517, un monje agustino llamado Martín Lutero clavó en la puerta de la iglesia del castillo de Wittenberg 95 tesis sobre las indulgencias. Su intención era someter a discusión el texto, de acuerdo con la práctica académica de la época. La acción fue interpretada como un desafío a la jerarquía eclesiástica. Este sencillo acto significó el principio de la Reforma.
Un recorrido panorámico en la historia de los distintos movimientos de Reforma permite ver que estos siempre mantuvieron diferencias. Pero este movimiento resalta aportes que en conjunto ha legado a la humanidad y la civilización del mundo contemporáneo.
El legado espiritual
“A pesar de las diferencias entre los distintos movimientos reformadores, resulta indiscutible que la Reforma supo afirmar un conjunto de pilares teológicos en los que se manifestaron unánimes todos los reformadores y que perfilaron con claridad su legado espiritual” (Vidal, 2016, p. 215).
1. La Biblia es devuelta al pueblo (Sola scriptura). La Reforma defendió que la única autoridad de fe y conducta es la Palabra de Dios (Mt. 5:17; Mr. 7:13; Lc. 24.44; Jn. 5:39). Los prerreformadores y reformadores como Erasmo de Róterdam, Pedro Valdo, John Wycliffe, Juan Huss, Martín Lutero, William Tyndale tradujeron o patrocinaron la difusión del texto bíblico.
La Biblia en español. Francisco de Enzinas publicaría la primera traducción del Nuevo Testamento, directamente del griego. La sucesión de persecuciones a raíz de esta traducción fue feroz, pero no pudo contener a hombres de Dios como Casiodoro de Reina, quien publicó la traducción completa de la Biblia al español: Biblia del Oso. Más adelante, la traducción de Reina sería revisada por Cipriano de Valera y publicada en 1602 ya con la denominación de La Biblia Reina-Valera.
Cada vez la religión de Roma tuvo que hacer uso de documentos falsos y adulterados para defender sus dogmas; a ello los reformadores respondieron: ¡Sola scriptura!
2. El Evangelio es devuelto al pueblo. Esto a través de dos medios:
• Sola fide. Roma manejaba el monopolio de la salvación (confesiones, penitencias, incluso la venta de indulgencias); ante esto, la Reforma levantó su voz: “Arrepentíos y creed en el Evangelio” (Mr. 1:15), “El que cree en el Hijo tiene vida eterna” (Jn. 3:36), y “el justo por la fe vivirá” (Ro. 1:17).
• Sola gratia. La Reforma recuerda que lo grandioso del Evangelio es que ofrece la salvación de manera gratuita, Jesús es el Salvador del mundo (1 Tim. 2:4-6; Ef. 2:8, 9).
3. Cristo es devuelto al pueblo (Solo Christo). La distancia que se decía existía entre los hombres y un Dios airado como lo presentó Roma fue desmentida por el mensaje del Evangelio.
La inmensa cadena de santos y vírgenes intercesores inventados para ser medios de lucro económico de penitentes que iban a buscar sus favores perdieron su influencia en millones de personas que oyeron el mensaje de la Reforma anunciando: “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre” (1 Tim. 2:5). La Reforma resalta que Cristo es el principio y fin de todos los propósitos de Dios, que todo está sometido a sus pies (Ef. 1:22).
4. La Eucaristía o cena del Señor es devuelta al pueblo. Antes de la Reforma, los creyentes comulgaban solo el pan en las misas. Solo el clero participaba de ambos elementos. La Reforma estableció cambios respecto a ello (Mt. 26:29), en los que se afirma que los participantes lo hacían de ambos elementos (Mr. 14.22; Lc. 22:19, 20; 1 Co. 11:23-26; Jn. 6:53-56).
5. El sacerdocio es de todos. Ya no existen divisiones en las que los que ejercen el sacerdocio son superiores al común de personas. Hay un solo sumo sacerdote (He. 4:14), que es Jesucristo, los demás somos un reino de sacerdotes. Así, los creyentes pueden participar de la liturgia, la evangelización, la cena del Señor, sin necesidad de intermediarios (Gonzáles, 2016).
El legado cultural
No queda duda de que los efectos de la Reforma trascienden lo religioso y terminaron por afectar positivamente la cultura del mundo.
1. La visión bíblica del trabajo. Antes de la Reforma, el trabajo era clasificado de dos formas: el sagrado y el secular. El primero, visto como superior, se decía era más valioso que el segundo. En algunas otras culturas, el trabajo es visto como un castigo y maldición.
Toda la teología después de la Reforma vio el trabajo como medio de glorificar a Dios. Cuando la esclavitud decayó en muchos países, también las economías decayeron, excepto en aquellas que fueron influenciadas por la Reforma. Fueron los cristianos protestantes y los judíos con una ética laboral los que serían gestores de las principales economías del mundo después de la Edad Media.
2. La visión financiera. Uno de los padres de la sociología, Max Weber, afirma que los protestantes herederos de la Reforma jugaron un rol importante en el progreso de los países industrializados como en el desarrollo de la banca moderna. Inglaterra, Holanda y otros países más pobres lideraron el capitalismo, cosa que no ocurrió con Francia, Italia, España y Portugal, donde triunfó mayoritariamente la contrarreforma católica.
3. Visión bíblica de la educación. “La educación en lugar del analfabetismo”. En mayo de 1536 se estableció la primera escuela pública y obligatoria de la historia en la ciudad protestante de Ginebra, Suiza. Antes de esta fecha, la educación estaba destinada a ser un privilegio de pocos. Asimismo, el 5 de junio de 1559 se marcaría un hito en la historia de la educación universal cuando en la misma ciudad de Ginebra se instaló la primera universidad abierta para todos.
Las naciones con mayoría reformada hicieron grandes esfuerzos para educar a sus ciudadanos; a fines del siglo XVI, los países protestantes tenían a su población altamente alfabetizada, contrariamente a los países de gobiernos católicos (García, 2017). Grandes pedagogos influenciados por la Reforma tienen en su lista a hombres como el suizo Johann Heinrich, conocido como Enrique Pestalozzi (1746-1827). Gracias al gran trabajo de este hombre, el analfabetismo desapareció completamente de Suiza. Todo lo contrario pasaba en los países católicos, como España, que para 1808 tenía al 90% de su población como analfabeta (Vidal, 2016).
4. Una visión bíblica de la ciencia. Génesis afirma que el hombre fue creado para ser señor de la creación. Por lo cual, después del oscurantismo científico anterior a la Reforma, que había sido condenada por la Iglesia romana, las naciones protestantes patrocinaron la libertad para que el desarrollo científico alcanzara cumbres antes insospechadas. Entre los más destacados científicos protestantes de los años posteriores a la Reforma están:
• Francis Bacon (1561-1626). Estableció el método científico y escribió textos de teología protestante.
• Johannes Kepler (1571-1630). Luterano que revolucionó las matemáticas y la astronomía, y al igual que Bacon escribió libros de teología.
• Robert Boyle (1627-1691). Creador de la química moderna. Fue también un apasionado protestante que apoyó financieramente para la traducción del Nuevo Testamento al turco.
• Podríamos citar una enorme lista de cristianos protestantes que sumaron al desarrollo científico posreforma. Paralelamente, la Iglesia romana ejecutaba a hombres como Galileo (Vidal, 2016).
5. Liberación del terror. La inquisición había aterrorizado a todos aquellos países en los que se instauró, pero no ocurrió lo mismo en los países de fe protestante. No es coincidencia que los regímenes totalitaristas, opresores y abusivos surgieran en naciones con un pasado inquisitorial marcado. Ejemplo de ello es Austria, donde nació Hitler, o la católica ciudad de Baviera, en la que el nazismo obtuvo su primer triunfo. Algo que no sucedió en países con un pasado protestante como Noruega, Suecia, Dinamarca, Gran Bretaña, Estados Unidos o Canadá.
6. Visión bíblica de la misericordia. Calvino había establecido en Ginebra medios de asistencia para los refugiados que huían de la violencia católica. Además de prestar ayuda, fueron muchas las necesidades que se buscaron suplir entre 1550 y 1560. Se calcula que en ese período de 10 años pasaron más de sesenta mil refugiados por allí. La ciudad no era grande; sin embargo, se hicieron grandes esfuerzos para socorrer a los necesitados.
La emancipación de los esclavos, la Cruz Roja Internacional, los orfanatorios, los centros de asistencia social son el resultado de la influencia de la Reforma.
7. La dignidad de la mujer. La dignidad de la mujer, elevada a un nivel tan alto en el Nuevo Testamento, tanto por Jesús como por las iglesias del primer siglo, fue tenida muy en poco durante la Edad Media (Vidal, 2016). Al retornar al estudio de las Escrituras, los reformadores hallaron sin dificultad que esto no debía ser así. De manera que le devolvieron el lugar de dignidad correspondiente al rol de la mujer en la sociedad y la Iglesia.
8. Promoción del arte y las ciencias. Mencionaremos tres campos importantes:
• En la pintura. Los artistas protestantes posreforma, como Rembrandt y Vermeer, retrataron escenas bíblicas como escenas de lo cotidiano. Por ejemplo, a alguien ejerciendo alguna actividad “común”, y de esa manera estaban plasmando el entendimiento teológico de que toda actividad glorifica a Dios. En ese sentido, el arte fue un medio para comunicar verdades maravillosas de la fe.
• En la música. La música fue otro medio que la Reforma transformó. Durante siglos, Roma había hecho del latín el idioma de las liturgias, y los asistentes no tenían ninguna participación del culto. Con la Reforma, hombres como Lutero compusieron himnos y alabanzas cantadas para Dios en el idioma del pueblo. Se dice que para cuando el genio músico protestante Juan Sebastián Bach comenzó a componer, ya existían más de cinco mil corales de producción reformada. Lo mismo ocurriría con Federico Haendel, cuyo tema más conocido es “El Mesías” (Vidal, 2016).
• En las letras. “La traducción de las Escrituras limpió, fijó y dio vigor a las lenguas europeas, como no lo había podido hacer ningún otro esfuerzo literario” (Fletcher y Ropero, 2008, p. 2429).
(*) Fuente: Vidal, C. (2016) El legado de la Reforma. Tyler, Texas, EE. UU. Editorial JUCUM