A principios de mayo, la misión cristiana promovió un evento evangelístico en un campo abierto llamado Kaunda Square, junto con pastores locales, sin saber que el campamento se usaba para practicar la brujería. Dicho lugar era donde los residentes solían adorar ídolos y cometer asesinatos como una forma de sacrificio, la gente también se ahorcaba en los árboles del campo como una forma de autosacrificio.
El ayuntamiento aceptó que la misión cortara los árboles para desarrollar el evento. Poco después el hechicero principal de la ciudad sufrió un dolor intenso y desapareció, por lo que algunos creen que estuvo relacionada con Dios. Durante la celebración, dos pastores anunciaron el Evangelio y pidieron a aquellos que querían abandonar el ocultismo quemaran sus ídolos como una forma de renunciar a sus prácticas de hechicería para aceptar a Jesús como salvador.
Sorprendentemente, el hechicero llamado Datsun, que había desaparecido inicialmente, arrojó sus accesorios al fuego, lo que fue inesperado para muchos. “Desafortunadamente, no puso todo y todavía no había recibido a Jesús, por lo que fue atormentado por demonios toda la noche cuando regresó a casa”, dijo el pastor.
Para el día sábado, Datsun regresó a la cruzada para quemar los restos de todos sus implementos que usaba para rituales de hechicería. Después de tal renuncia y haber pasado a testificar cómo había recibido libertad por medio de Jesús, otros cinco hechiceros también quisieron rendir sus vidas a Cristo, ya que el testimonio de Datsun los impactó mucho.
En la cruzada, además de la salvación, se registraron milagros, incluyendo el caso de una niña de 2 años que fue curada de un tumor cerebral del tamaño de una manzana en la cabeza. “¡Se derritió visiblemente unos centímetros durante la oración! La madre vino a nosotros llorando y nos contó lo que había sucedido”, finalizaron de testificar los pastores de la misión.