La sharia, derivada del Corán y sobre todo de la Sunna, es un conjunto de normas y principios que rigen la vida de los musulmanes en distintas áreas: la moral, la ética, la religión, la política, los negocios y la conducta social. Hay normas obligatorias como rezar cinco veces al día; recomendadas, como rezar más veces; permitidas, como todos aquellos no recogidos en las demás categorías; no aconsejadas, como divorciarse; y prohibidas, como robar, mentir o beber alcohol.
Esta ley islámica es muy estricta, por así decirlo, “ortodoxa”, ya que a quienes transgreden las normas establecidas tienen que ser castigados con flagelación, amputación, exilio y hasta ejecución de sus vidas. Dentro de este compilado exigente y complejo hay prohibiciones que afectan a quienes tienen vínculos con los cristianos, como es el caso de no estar con aquellos que son extraños a la religión.
En países del sur de Asia, la sharia está tomando mucha importancia. Pero recientemente, el tribunal más alto de Malasia invalidó varias leyes penales basadas en la misma sharia, las cuales son promulgadas por legislaturas estatales.
Esta decisión fue pronunciada por un panel de nueve miembros del Tribunal Federal, fue de 8 a 1 y declaró como nulas e inválidas 16 leyes que imponían castigos basados en el Islam. El presidente del Tribunal Supremo, Tengku Maimun Tuan Mat, quien lideró la decisión mayoritaria, ha afirmado que el estado carece de autoridad para promulgar leyes, ya que esto corresponde a los poderes legislativos del parlamento.
Este fallo histórico podría tener repercusiones en otras zonas del país de mayoría musulmana, que cuentan con leyes sharia parecidas. Las leyes islámicas anuladas afectan al estado rural de Kelantan.
La población de Malasia tiene una gran mayoría islámica (97%). Y el estado de Kelantan ha sido gobernado por el Partido Islámico Pan-Malasio, o PAS, desde 1990 y aboga por una interpretación más estricta de la ley islámica.
Podemos ver que el Islam se ha extendido muy considerablemente en Asia y otras partes del mundo, y que ha tomado un protagonismo increíble en el gobierno y la influencia cultural. A pesar de esto, y las nocivas exigencias que impone y se aprueban en una nación, Dios ha sido bueno permitiendo que se anulen estas mismas leyes que afectan al pueblo cristiano. El Señor es todopoderoso y ama a los malayos, deseando que conozcan la verdad de Él y su unigénito Jesús. Espero que hayan sido muy edificados. Dios les bendiga mucho, querida Comunidad de Impacto Evangelístico.